Las producciones cárnicas de Argentina, Uruguay, Brasil y otros países de América Latina aumentaron el volumen de exportación a China durante 2022, de acuerdo a datos publicados por el Ministerio de Comercio de China.
De hecho, solo en la primera mitad de este año, la carne de res importada desde Uruguay registró una suba del 26 por ciento y, desde 2015, se importa más de la mitad de la producción del país.
La carne sudamericana ocupa una gran parte de las importaciones del gigante asiático, una apertura comercial propiciada por la Iniciativa de la Franja y la Ruta.
En los últimos años, China se convirtió en uno de los consumidores más importantes de la carne proveniente de Latinoamérica y la demanda sigue en aumento, ya que se utiliza en platos típicos por su calidad.
Chongqing, uno de los mercados más importantes del oeste chino, tuvo un crecimiento exponencial gracias a la Iniciativa de la Franja y la Ruta, que ayudó a una apertura comercial del país y al posicionamiento de los productos de los países miembros.
El Nuevo Corredor Internacional de Comercio Terrestre y Marítimo es una pieza clave para la conexión con el mercado de Occidente con la apertura de nuevas rutas, por las cuales también pasa la carne importada de América Latina.
El corredor comercial fue construido conjuntamente por varias regiones del oeste de China y algunos Estados miembro de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), con Chongqing como su centro de operaciones, con el fin de lograr un transporte eficiente de mercancías utilizando diversos modos, como ferrocarriles, carreteras y vías fluviales.
CHONGQING
De acuerdo con datos oficiales, en los primeros nueve meses del 2022, Chongqing transportó a través del corredor 105.000 TEU de mercancías por valor de 19.100 millones de yuanes, lo que supone aumentos interanuales del 29 y el 46 por ciento respectivamente.
El corredor inauguró 78 nuevas rutas de carga, elevando el número de destinos a 338 puertos y alcanzando a 113 países.
Según un informe del Banco Mundial, los proyectos de la Franja y la Ruta podrían ayudar a sacar de la pobreza extrema a 7,6 millones de personas.
Además, proyectan que el volumen comercial y los ingresos se incrementarían en un 6,2 y un 2,9 por ciento respectivamente a nivel mundial, fomentando el crecimiento de la economía.
