La actividad agroindustrial registró una disminución en febrero

En el mes de febrero la actividad de la agroindustria nacional, medida por el Índice de Producción Agroindustrial (IPAA BCR) manufacturero estimado por la Bolsa de Comercio de Rosario, experimentó una caída del 1% en comparación con el mes anterior.

El Índice de Producción Agroindustrial (IPA) manufacturero, publicado por la Bolsa de Comercio de Rosario, es una medida compuesta por varias actividades industriales relacionadas con el sector agrícola-ganadero. Estas actividades se detallan en el panel de indicadores económicos de la agroindustria. El IPA manufacturero tiene como objetivo proporcionar una visión general del desempeño de las actividades que conforman el sector agroindustrial a lo largo del año.

A pesar de este descenso, se observa una tendencia ascendente y se considera que octubre de 2023 marcó un punto bajo para la actividad del sector. Con estos datos, la actividad se encuentra en niveles similares a los de febrero del año anterior.

El desempeño del sector estuvo en declive desde el mes de marzo, reflejando los desafíos significativos que enfrenta, incluyendo la sequía durante la campaña 2022/2023, la alta inflación, la menor demanda interna y otros factores. La llegada del fenómeno de El Niño a fines de octubre trajo consigo lluvias importantes que ayudaron a mejorar la humedad del suelo, lo que generó grandes expectativas para la siembra gruesa.

Los meses de noviembre y diciembre también fueron favorables en términos de precipitaciones, pero en enero se registró una ola de calor significativa que resultó en la pérdida de aproximadamente 100 mil hectáreas de soja, según las últimas estimaciones disponibles. A pesar de esto, se espera que la cosecha gruesa sea considerablemente mayor que la de la campaña anterior.

En el mes de enero el principal incremento mensual se registró en la industrialización de girasol, con un incremento mes a mes del 15,2%. Dentro del sector agrícola industrial, sólo la industrialización de trigo pan acompañó al girasol en terreno positivo, con una variación mensual de 1,3%.

Por otro lado, la industrialización de cebada y soja exhibieron una variación mensual negativa, de -1,3% y -4,5%, respectivamente. En lo que respecta a biocombustibles, tanto la producción de bioetanol a base de maíz como la producción de biodiesel registraron caídas respecto a la producción del mes inmediato anterior, con una variación de -6,6% para el primero y de -12,0% para el último.

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