«Nuestro principal objetivo es entregar el mejor precio a nuestros clientes, con lo cual debemos ser muy eficientes con los costos, y los centros de distribución tienen un nivel de tecnología adaptado a nuestro flujo».
¿Cuántas tiendas y SKU’s o ítems suelen gestionar?
Tenemos 1.050 tiendas distribuidas en Capital Federal, Gran Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires, Entre Ríos, Corrientes, Salta, Jujuy, Córdoba y Santa Fe.
En cuanto a nuestro surtido, está entre las 3.500 y 4.000 referencias, y el mismo se replica en el 100% del parque de tiendas en Argentina.
¿Cuánto hay de importado y cuánto de origen nacional en estos productos?
Básicamente lo que compramos al exterior de forma directa son las papas tubo y el atún. Seguramente hay en la cadena de abastecimiento productos importados que son parte de los que nos entregan los proveedores nacionales, pero lo nuestro -bajo nuestra marca propia- es foco en: alimentos, higiene y limpieza.
¿Cómo es el “mapa logístico” que aplicas en tu gestión?
Por el tipo de tiendas que nosotros tenemos, que son tiendas de proximidad -de superficies pequeñas no comparables con un hipermercado- necesitamos tener mucha proximidad. Es decir, contar con el abastecimiento lo más cerca posible de nuestro cliente final, que es la tienda.
Para eso, construimos centros de distribución a no más de 30/40 kilómetros de nuestras tiendas, para tener una rotación del transporte mucho más ágil que la habitual.
Actualmente tenemos seis centros de distribución, uno para la región norte de la Ciudad de Buenos Aires, que está en Vicente López, otro para la región sur de Buenos Aires, que está en Burzaco, después tenemos un centro de distribución en Paraná, uno en Salta y un nuevo centro de distribución que abrimos el año pasado, en Garín, que es un hito en la historia de Día Argentina por su gran tamaño.
Se trata de un centro de distribución de 60.000 metros cuadrados, desde el cual abastecemos a todo el “non-food”, incluyendo higiene personal y limpieza, tiendas del interior, tiendas de capital y del Gran Buenos Aires también.
¿Cuál es el rol de la tecnología para sumar eficiencia en las operaciones?
Nuestro principal objetivo es entregar el mejor precio a nuestros clientes, con lo cual debemos ser muy eficientes con los costos, y los centros de distribución tienen un nivel de tecnología adaptado a nuestro flujo. En este sentido, tenemos un WMS que está desarrollado y provisto por España y enfocado en nuestra cadena logística, de muy bajo volumen a la unidad, con muchos clientes.
Para agilizar el abastecimiento a nuestras más de mil tiendas, implementamos “voice picking”, con el objetivo de poder acelerar y hacer más eficientes nuestros procesos de picking.
También tenemos radiofrecuencia para gestionar los equipos de movimiento de pallets y, entre el 2022 y 2023, implementamos un sistema de “pick to light” que hace más fácil la preparación y la recepción en nuestras tiendas.
Actualmente, estamos evaluando implementar tecnologías que hagan más eficientes los movimientos internos dentro del centro de distribución, tanto de la mercadería recibida como de la mercadería preparada. En un centro de distribución de 60 mil metros cuadrados, es fundamental que los recorridos se minimicen.
En cuanto a lo soft de la logística, que es el movimiento de mercaderías, tenemos tecnología en el back office para todo lo relacionado al proceso de reabastecimiento a las tiendas y a los modelos de cálculo de demanda y pronósticos de demanda.
¿También aplican tecnología para la gestión del transporte?
Tenemos nuestro TMS (sistema de gestión del transporte) con toda la gestión satelital. Son casi 400 camiones que están en la calle todo el día, a los cuales debemos monitorear por seguridad y, también, para recabar datos de la actividad: tiempos de parada, tiempos de frenado, aceleración, velocidades, etc. De esta manera, generamos mucha información de la que nos podemos nutrir para gestionar mejor la supply chain de Dia.
¿Cuáles son los aportes que la cadena de abastecimiento realiza en poder ser de ese objetivo?
El costo logístico se compone tanto del costo de almacenamiento, como del de preparación y transporte. En este sentido, siempre trabajamos en dos líneas para generar eficiencias: mayor ocupación y mayor rotación del camión son dos claves fundamentales.
Para mejorar la ocupación tenemos que trabajar sobre la demanda que generan nuestras tiendas para que cada vez que pidan, lo hagan en el formato del camión asignado. Y para mejorar la rotación, tenemos que trabajar sobre los tiempos muertos, tanto en las estadías en los centros de distribución como en las de las tiendas al momento de la descarga. Por eso, llegar en la banda horaria que le corresponde de cada tienda es clave para que la misma esté preparada y el camión no tenga que esperar.
Por otro lado, nuestra distribución es muy urbana, con lo cual generalmente los camiones llegan a lugares donde no se puede estacionar o tiene dificultades. Por ello, tenemos que ser muy precisos en la banda horaria comprometida con la tienda.
Y finalmente, en los centros de distribución, la misma lógica: implementar tecnologías que permitan hacer más eficiente el proceso de picking. Básicamente ahí están las claves de nuestro negocio.
¿Hacia dónde crees que va el retail del futuro?
Yo creo que está en la proximidad, o sea, en nuestro formato Dia y en el formato de la proximidad, ahí va a estar dada la batalla. Con lo cual, tenemos de cara al futuro una solución que va a ser súper competitiva y que tiene que estar muy bien linkeada con el eCommerce.
La propuesta de eCommerce y la omnicanalidad tiene que ser la misma, tanto comprando en el supermercado físicamente como comprando online.
Los grandes formatos del tipo hipermercados están moviéndose o transformándose a otro modelo más mayorista, pasa en Brasil, pasa en el mundo, está pasando en Argentina, y esa es la otra solución a la cual se va a mover el hipermercado tradicional. Pero la batalla va a estar en la proximidad.
¿Cuáles son los valores o habilidades claves de los talentos enfocados en la logística retail?
El talento que nosotros buscamos es un perfil técnico, ingeniería, administración de empresas, al que luego le sumamos la cultura de la empresa, a través de las capacitaciones y las formaciones que continuamente ofrecemos.
Es un trabajo bastante duro el de la logística, con lo cual tenemos que trabajar sobre los perfiles técnicos, desarrollando habilidades más soft en negociación, en liderazgo, en compromiso con esa cultura. Hacia ese perfil vamos.
