A través de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y la Secretaría de Comercio nacional, en Argentina oficializaron el nuevo Sistema de Importaciones (SIRA) que deja en desuso al anterior Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI).
La determinación llegó después de detectar numerosas inconsistencias de los agentes importadores, tanto en su capacidad económica, como también en el uso de prácticas abusivas en la interposición de medidas administrativas o judiciales para eludir el mencionado SIMI.
Este nuevo sistema aplica de forma inmediata para los importadores inscriptos al Registro Especial Aduanero previsto por la Resolución General N°2.570 de la AFIP.
A través de la Resolución General Conjunta 2022-5271, ambos organismos buscarán facilitar el comercio mundial mediante la facilitación de información anticipada para detectar operadores que pretendan eludir los controles aduaneros y a la vez agilizar las operaciones.
Ambas organizaciones se comprometieron a trabajar conjuntamente en el “desarrollo de instrumentos y mecanismos que optimicen los controles aduaneros y favorezcan la competitividad y el comercio exterior”, según subrayó el comunicado oficial.
REPECURSIONES
Mediante la resolución, también se expresó la necesidad de adecuar y sustituir el Sistema Integral de Monitoreo de Pagos al Exterior de Servicios (SIMPES) para unificar criterios de control.
Para la AFIP, este sistema “tiene entre sus objetivos el de evaluar, en el ámbito de su competencia, la oportunidad, mérito y conveniencia para la puesta en marcha de políticas y acciones que afecten el comercio, así como el impacto económico en relación al cumplimiento de las medidas generadas y ejecutadas, desarrollando criterios e indicadores que permitan el control estratégico y la generación de proyectos a futuro”.
Como medida adicional para armonizar los pagos al exterior, el ente recaudador desarrolló la Cuenta Corriente Única de Comercio Exterior en la cual todas las entidades autorizadas a operar en el Mercado Libre de Cambios por el Banco Central de la República Argentina deberán registrar el importe en pesos del total de cada una de las operaciones cambiarias relacionadas a operaciones de importación.
De todas maneras, estas medidas no fueron bien recibidas por el sector importador y exportador, dado que lo consideraron como un obstáculo operativo más a las restricciones recientemente impuestas en el país sudamericano.
