Los ministros de transporte de ambos países, reunidos en una cumbre bilateral, avanzaron en una hoja de ruta para mejorar la conectividad y la agilidad del comercio internacional por la vía terrestre.
El conjunto de compromisos alcanzados promete transformar la forma en que se gestiona el tránsito entre los dos países.
Se espera que este nuevo enfoque en el transporte transfronterizo no solo tenga implicaciones económicas, sino también sociales y culturales, ya que promete abrir nuevas oportunidades y facilitar la interacción entre las poblaciones fronterizas.
Agilidad y transparencia
Entre los puntos destacados surgidos en la cumbre bilateral, se destaca la coordinación de procedimientos para autorizar a las empresas y habilitar los vehículos destinados al transporte internacional de carga y pasajeros.
Esta medida apunta a simplificar los procesos burocráticos que a menudo retrasan y dificultan el tránsito eficiente de bienes y personas entre ambos países.
Además, se acordó la emisión de autorizaciones temporales y/o especiales para las empresas internacionales de transporte, asegurando que las operaciones sigan adelante sin obstáculos innecesarios.
También en el aspecto tecnológico, ambas naciones se comprometieron a establecer sistemas de información compartidos. Los mismos permitirán consultar y compartir información sobre las operaciones de transporte internacional de carga, agilizando los procesos y permitiendo un seguimiento más eficaz de las operaciones.
Esto, además, mejorará la transparencia y contribuirá a la lucha contra el contrabando y otros problemas relacionados con el tráfico fronterizo.
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