Logística: de mal necesario, a pilar clave dentro de las organizaciones

En diálogo con Movant Connection, Alejandro Buenfil, vicepresidente del Consejo Nacional de Ejecutivos en Logística y Cadena de Suministro de México – ConaLog, nos brinda su visión sobre la actualidad del sector logístico y su importancia para el desarrollo económico del país y de su comercio exterior.

¿CÓMO DESCRIBIRÍA LA DINÁMICA DEL COMERCIO EXTERIOR MEXICANO Y SU LOGÍSTICA ASOCIADA ANTE EL CONTEXTO PLANTEADO POR LA CRISIS SANITARIA?

Nuestro principal socio comercial es Estados Unidos, el país con el que tenemos mayor número de transacciones. Como en todo el mundo, la actividad se vio afectada por cierres, clientes que cancelaron órdenes a último momento, productos que no se conseguían, entre otras problemáticas. La demanda cambió totalmente y los flujos internacionales se retrasaron. Por ejemplo, en contextos normales, traer un producto de China demora alrededor de 7 u o semanas, contemplando alrededor de 6 semanas de transporte marítimo, más el tiempo que se tarda en cargar el buque y los traslados vinculados. Ante los diversos cierres y cancelaciones, frenar ese canal que ya se encontraba en el “tubo logístico” nos dejó muchas incertidumbres, porque adicionalmente se movieron también los consumos. Observamos mayor demanda de determinados productos como el papel higiénico y el atún, que escasearon al inicio de la pandemia.

Toda la cadena de suministro tuvo que adaptarse muy rápido a esos ajustes en la demanda que se produjeron de un día para el otro. Teníamos mercancías que ya estaban en tránsito y otras que necesitábamos y no sabíamos cómo traerlas.

Para eso tuvimos que volvernos más creativos, rápidos y flexibles.

¿CUÁL ES SU VISIÓN SOBRE LOS CAMBIOS QUE LLEGARON PARA QUEDARSE EN LA LOGÍSTICA MEXICANA?

La logística sufrió una transformación radical. El mercado mexicano estaba muy enfocado hacia el comercio tradicional a través de tiendas departamentales y de autoservicio. De esta manera el 90% del comercio minorista se desarrollaba en tiendas físicas y solo el 10% por canales electrónicos.

Con el cierre de las tiendas, debido a la llegada de la pandemia, nos encontramos con un doble cambio. Por un lado, nuestra logística de abastecimiento estaba diseñada para que todas las operaciones fueran desde los centros de distribución hacia los puntos de venta, por lo que tuvimos que enfocarnos en la última milla, que se convirtió en el único canal de entrega al cliente y que creció 7 y 8 veces sus volúmenes en cuestión de semanas. Por otro lado, debimos implementar diversas normas de protección que comenzaron a ser exigidas por los clientes, como por ejemplo reemplazar la firma del conforme de entrega, ya que se rehusaban a tocar la hoja o la pantalla de nuestros dispositivos móviles.

Finalmente, tuvimos que enfrentar una ecuación compleja, como es la de alcanzar un mayor nivel de servicio y simultáneamente hacerlo a un costo menor, ya que los costos referidos al canal electrónico son de por sí más altos. Para esto debimos ser muy creativos, porque lo normal es que cuando se incrementa el nivel de servicio también se incrementan los costos.

¿CUÁLES SON LOS TEMAS QUE ACTUALMENTE DOMINAN LA AGENDA DEL SECTOR LOGÍSTICO?

La última milla, ya que entendemos que el comercio electrónico llegó para quedarse. La gestión de los costos y la competencia en los productos de consumo masivo que se ha vuelto más compleja, ya que muchas veces el diferenciador para el cliente termina siendo el precio y eso suele afectar negativamente a los márgenes de la operación logística, en un contexto donde los consumidores ya no son tan fieles a las marcas sino a los niveles de servicio.

En este punto, es importante comprender que la logística muchas veces termina siendo no solo la última cara que ve el cliente, sino la única. Para eso tuvimos que trabajar, y lo continuamos haciendo, en capacitar a nuestros colaboradores para que cuiden su imagen, su forma de expresarse, para garantizar una buena experiencia de los clientes.

Tenemos también la necesidad de transformarnos hacia una logística sustentable. En México existen disposiciones como “Hoy no Circula”, que establecen limitaciones a la circulación de los vehículos contaminantes, al no permitirles transitar uno o dos días a la semana.

Otro tema es el Blockchain, una tecnología que ha venido a revolucionar los procesos, a partir de la mejora en la eficiencia que permite la integración.

Así como la metodología “lean” y el “megadata” que permiten contar con información precisa para optimizar la toma de decisiones. Por último, también el sector está atento a cambios en las leyes aduaneras y en los tratados de comercio exterior.

¿CÓMO IMAGINA EL FUTURO DE LA ACTIVIDAD LOGÍSTICA?

Se va a tener que transformar en una logística mucho más ágil. En México estamos frente a uno de los mercados más grandes del mundo, como es el estadounidense, por eso resulta muy importante para países como China o Corea del Sur, poder llegar a nuestro país con sus productos. Esto nos ha transformado de tener una vocación manufacturera a una logística, por lo que tendremos que aprender a ser mucho más rápidos, versátiles y disruptivos.

El transporte que actualmente estamos utilizando en 10 años va a ser inviable, los vehículos articulados están sentenciados a desaparecer. Vamos a tener que resolver cómo mover grandes volúmenes de mercancía en menos tiempo, con menor costo y menores indices de maltrato de la misma, porque particularmente en el comercio electrónico el cliente es cada vez más exigente con los empaques.

Considero que, por temas de sustentabilidad, la cantidad de embalajes que utilizamos también se va a tener que ir reduciendo, porque no podemos seguir generando los volúmenes actuales de desperdicios.

Hoy los logísticos tenemos un gran reto. La pandemia nos puso en un primer plano dentro de las organizaciones, muchas de las cuales consideraban a su logística como un mal necesario. Hoy se dieron cuenta que no es así, que se ha constituido en uno de los grandes pilares de la organización, ya que muchas empresas lograron sobrevivir gracias a su logística. Nuestra labor ahora es mantenernos en ese primer plano en el que nos puso el contexto de crisis mundial.