Como nunca antes, los ojos del mundo están puestos en Qatar debido al desarrollo actual de la 22da Copa Mundial organizada por la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), hecho que no deja de significar una verdadera oportunidad para la logística y el comercio internacional.
Los 200 mil millones de dólares que demandó su organización representaron una gran inversión para generar encuentros de negocios, atraer a las principales marcas del mundo y, además, posicionar no sólo al país sino también a la región del Medio Oriente como un potencial hub logístico.
Es cierto que las posturas políticas y culturales qataríes no estuvieron exentas de polémicas al momento de su designación, pero, al ser uno de los países más ricos del mundo, las estimaciones de crecimiento nacionales se dispararon aún más e informes especializados ya indicaron que, a raíz de la actual Copa del Mundo, Qatar crecerá un promedio de 6,5 por ciento más por año durante el siguiente lustro.
Actualmente, las reservas de petróleo y gas siguen constituyendo la principal fuente de ingreso para el país árabe y las oportunidades de expansión también son estimuladas por distintas actividades industriales y el crecimiento del comercio electrónico, sectores que impulsarán nuevas inversiones extranjeras que permitirán a la nación mejorar su infraestructura logística con el objetivo de convertirse en un potente hub.
POTENCIA
El gobierno local pretende convertir al país árabe en un gran polo tecnológico y por eso este Mundial cumple un rol esencial para atraer mayores inversiones y posicionar a las principales marcas del mundo en su territorio.
Qatar no presentaría mayores inconvenientes en desarrollarse como un centro logístico de reconocimiento internacional gracias a su gran infraestructura e ingresos, lo que les permitió tener actualmente zonas francas, una potente aerolínea y otras grandes empresas de transporte de mercadería marítimo y terrestre (tanto carreteras como ferrocarril), haciendo especial hincapié en su capital, Doha.
Además, debido a su ubicación geográfica central, su conexión con el resto del mundo representa una verdadera ventaja, dado que se encuentra en un punto intermedio que permite unir potencias asiáticas y europeas e, incluso, a América y conectar a dos mil millones de personas en un viaje de avión menor a cinco a horas.
Asimismo, Qatar encontró una oportunidad en la pandemia del Covid 19 que les ayudó a impulsar su sector, dado que los bloqueos que generó el confinamiento cerraron las importaciones de los países árabes vecino y permitió a los qataríes involucrarse en las industrias para satisfacer las demandas logísticas europeas y asiáticas en la región sin detener la organización de su Mundial.
OPORTUNIDAD
El actual Mundial de fútbol organizado por la FIFA en Qatar es el evento deportivo más relevante y con mayor audiencia del planeta y así lo sienten también las empresas dado que se estima que la actual edición tendrá una audiencia total de 5000 millones de espectadores a través de distintas plataformas de transmisión.
Es entonces que este evento deportivo ya en transcurso se convirtió en una verdadera plataforma publicitaria efectiva para conectar a las marcas con los consumidores y generar verdaderas oportunidades de negocios para el comercio internacional.
De acuerdo a la consultora especializada GFK, es cierto, el Mundial aumenta el consumo y alienta las compras que no son habituales en la población como, por ejemplo, televisores o equipos de sonido, pero para las naciones (participantes o no) representa una ocasión inmejorable para generar relaciones bilaterales.
Por este motivo, uno de los primeros gobiernos de la región sudamericana en promover los vínculos comerciales fue Argentina, también en nombre del Mercosur, a través de reuniones entre su cuerpo diplomático y sus pares qataríes con la intención de posicionar productos locales y regionales en Medio Oriente.
Casualmente, según datos de su Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Argentina encuentra a su principal socio comercial en Medio Oriente a Arabia Saudita, rival que se impuso en el debut mundialista de ambos seleccionados.
Las exportaciones argentinas a este destino durante el 2021 ascendieron a 850 millones de dólares y entre enero y septiembre de 2022 los envíos fueron de 929,5 millones de dólares, lo que equivale a un 32 por ciento de aumento en términos interanuales. Por su parte, el Mercosur también brindó datos sobre la relación comercial del bloque con la sede de la Copa del Mundo y otros participantes y según datos del Sistema de Estadísticas de Comercio Exterior, actualmente hay un intercambio positivo de 1551 millones de dólares hacia Qatar, aunque, a raíz del presente Mundial, el bloque espera que las oportunidades de negocio aumenten.
