El bloque regional de Sudamérica está pasando por una etapa convulsionada en la cual conviven diversas miradas de sus países integrantes, algunas con planes de unión y otros de separación.
Desde hace algunas semanas, el Mercado Común del Sur (Mercosur) está intentando avanzar en el fortalecimiento de los procesos de integración regional, pero aún desconoce si contará con todos sus miembros en el futuro.
Esto se debe a que desde la presidencia de Luis Lacalle Pou, Uruguay ratificó recientemente la decisión de solicitar el ingreso al Acuerdo Transpacífico (CPTPP) que había comunicado a mediados de noviembre al resto de las fuerzas políticas a nivel nacional.
Argentina, Brasil y Paraguay fueron los principales críticos del acercamiento unilateral al TPP-11, tratado al que se había unido Chile recientemente y al que Perú ya pertenecía, debido a la falta de voz y voto del resto de los miembros del bloque.
Lacalle Pou fue crítico de las medidas del bloque en la cumbre del Mercosur en Montevideo: “Somos una de las zonas más proteccionistas del mundo. Estamos ante un panorama geopolítico que impresionan. Los países que son los más cerrados son los que más se están abriendo al mundo. Los países libremercadistas hoy se están protegiendo. ¿Qué va a hacer esta región?”
Además, el presidente de Uruguay resaltó la necesidad de una apertura comercial de su país al mundo.
En el medio de esta discusión, Alberto Fernández, presidente de Argentina, asumió la presidencia pro tempore del Mercosur por seis meses y se refirió al tema: “La solución no es que cada uno haga la propia, sino que hay que mantenerse unidos y ver cómo corregir las asimetrías que hay dentro del Mercosur”.
El mandatario argentino también señaló que lo que necesita el Mercosur “es un Brasil, un Uruguay y un Paraguay potentes” y que “lo que más queremos es potenciar nuestro comercio”. “Seguramente habrá que hacer correcciones, pero estoy dispuesto a escuchar y analizar todo lo que tenemos que corregir”.
ACUERDO
A pesar de las discrepancias entre los países miembros sobre los Tratados de Libre Comercio, el Mercosur avanzó en un Memorándum de Entendimiento con el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) con el propósito de mejorar la calidad de vida de los habitantes de Latinoamérica.
El acuerdo sirve para establecer un marco general de colaboración entre ambos organismos y para elaborar un programa de trabajo de cooperación regional que defina las modalidades de asistencia técnica y financiera.
“Nos complace sumar aliados para mejorar la calidad de vida de los latinoamericanos y caribeños y promover la competitividad de la región. Este acuerdo con el Mercosur explorará oportunidades de trabajo conjunto en infraestructura con enfoque en la sostenibilidad, integración productiva, transformación digital, inclusión, equidad e igualdad de género”, destacó Sergio Díaz-Granados, presidente ejecutivo de CAF.
El primer paso de este convenio será el proyecto de integración regional para la construcción del Puente Internacional sobre el río Uruguay entre Monte Caseros y Bella Unión, que será el cuarto punto de conexión entre Argentina y Uruguay.
