Expectativas de electrificación del transporte contrastan con la disponibilidad de infraestructuras

En el marco de la sesión de gestión de mitad de año de la Asociación Estadounidense de Camiones (ATA), su presidente, Chris Spear, destacó que es prioridad de la asociación “educar a los legisladores sobre los riesgos de apresurar la transición hacia los vehículos eléctricos y de celdas de combustible”, en relación a la decisión reciente de la Junta de Recursos del Aire de California de avanzar con su regulación Advanced Clean Fleets (CARB).

De acuerdo con el referente del transporte terrestre, esta decisión sería prematura, ya que requerirá que algunos autotransportistas que operan en el estado comiencen la transición a camiones de cero emisiones tan pronto como el próximo año.

El objetivo de CARB es que las flotas que operen en el estado sean 100 % eléctricas para 2035, 2040 o 2045, según el tamaño y el tipo de camión.

Al respecto, muchos transportistas han expresado su preocupación ante la poca disponibilidad de vehículos de cero emisiones, así como sobre el nivel de infraestructura requerida para impulsarlos, la cual no estaría disponible para alcanzar las expectativas que plantea la regla.

“No estamos diciendo que no. Tenemos un pedigrí de 40 años trabajando con la EPA para reducir las emisiones del tubo de escape, para implementar el mejor y más innovador equipo disponible. Y han permitido que nuestra industria actual trabaje en colaboración para permitir que prospere la innovación”, resaltó Spear.

Y agregó, “Los objetivos que se están proponiendo son simplemente demasiado agresivos. Y esta conclusión no viene solo de mí como líder de la asociación. Eso viene de los ingenieros, los innovadores, las personas que realmente saben lo que se necesita para esta transición.”

En sintonía, del otro lado del Atlántico, durante el Foro Nacional en Transporte y Logística organizado por el Centro Tecnológico Cartif, su director general, José Ramón Perán, señaló que el transporte de mercancías se ha quedado “desfasado”, motivo por el que reclamó a la Administración central que “ponga las condiciones necesarias técnicas, económicas y de funcionamiento para que el transporte de mercancías alcance los porcentajes de los países más desarrollados”.

En relación a los plazos estimados para alcanzar la electrificación de la automoción, que “debe ser de primera y de última milla”, estimó el final de la quema combustibles fósiles para un periodo de 20 años, momento en el que habrá que estar preparados con la electrificación y el hidrógeno verde, que “desplazará a la emisión de CO2”.

Por su parte, el presidente del clúster de automoción de Castilla y León (Facyl), Félix Cano, señaló que “hay que tener mucho cuidado con el desarrollo tan disruptivo que se está haciendo en tan poco tiempo con el transporte eléctrico.”

En este sentido, apostó por “acompasar los tiempos” y puso como ejemplo la definición de la música, que “es el arte de combinar los sonidos con el tiempo”. “Aquí pasa lo mismo. Nada adelantamos con tener vehículos eléctricos si no tenemos la infraestructura hecha.”

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