Desafíos y oportunidades comerciales para América Latina

El nuevo contexto global brinda a la región latinoamericana la posibilidad de posicionarse
como gran proveedora de alimentos y commodities pero, además, también de sumar más valor agregado.

Sobre esto dialogamos con Andrea Bulnes Acevedo, quien nos comparte su mirada como impulsora del comercio exterior peruano y de la región.

¿De qué se trata el Círculo de Estudios para el desarrollo del Comercio Exterior?

Es un círculo académico que nació en el año 2020 y está conformado por estudiantes y egresados de distintas carreras internacionales que tienen en común el interés por el comercio exterior. La meta es un “think tank” (laboratorio de ideas) y por eso en nuestros primeros meses estuvimos realizando charlas académicas, conferencias sobre los nuevos reglamentos para el Covid-19 en Perú y conversatorios sobre las noticias del comercio donde los participantes podían dialogar e intercambiar opiniones.

Actualmente, el grupo está conformado por 25 personas que, además de los eventos, escribimos artículos y estamos abiertos a otros países.

En base a tu experiencia trabajando en el Ministerio de Comercio Exterior del Perú, ¿cómo describirías el panorama actual del comercio internacional?

Desde 2020 muchos hablan de una globalización mucho más lenta, otros del final de la globalización, lo cual es prácticamente imposible ya que no solo se trata de comercio, bienes y servicios y movilidad de personas, sino también de tecnología, cultura, etc. Sí estoy de acuerdo en que a partir de la guerra comercial con China, la aparición de Trump, el Brexit y la guerra con Ucrania hay una tendencia de crecimiento del comercio mucho más lenta, aunque este año se está viendo una recuperación.

Ya no vamos a ver estas tendencias de un comercio en cadenas globales de suministros muy diversificadas y vamos hacia una regionalización. Seguiremos teniendo globalización, pero más enfocada a regiones ya que justamente lo que surgió en la pandemia en China es que las cadenas de suministro se detuvieron. En base a ello, las principales empresas están buscando cambiar sus zonas de producción a otros países, con tendencias hacia las regiones más cercanas.

También es importante mencionar el comercio de servicios que está creciendo a pasos agigantados en comparación al comercio de bienes. A pesar de la pandemia, si analizamos los últimos años vemos que los servicios han crecido en un 50% anualmente mientras que los bienes están en un 20-25%.

En la Organización Mundial del Comercio se está hablando del e-commerce y del comercio de bienes y servicios en torno al medioambiente. Justamente estamos hablando del abastecimiento de la agricultura, de una crisis alimentaria y viendo un enfoque hacia un comercio más sustentable y relacionado a los productos agrícolas.

Por otro lado, la pandemia le dio el empuje que necesitaba al comercio electrónico, para que las pequeñas y medianas empresas se actualicen y sean competitivas. De hecho, en el último foro a nivel ministerial se aprobó la “moratoria de comercio electrónico” por otros dos años, hasta la próxima conferencia. Esta medida se basa en que los países no pueden poner impuestos o aranceles a las transacciones electrónicas, con lo que promoverá el e-commerce a nivel global.

En este contexto de menos globalización, ¿cómo se posiciona Latinoamérica? ¿Cuáles son sus socios comerciales?

América Latina tiene una gran oportunidad para aprovechar esta temporada, en la que las grandes empresas están buscando diversificar sus lugares de producción fuera de China. Nuestra región debería aprovechar también su proximidad a EEUU y con el Asia del Pacífico para posicionarse en cadenas de valor y aportar, no solo materia prima, sino también con productos más desarrollados y servicios.

La clave es diversificar. En el caso de Perú, el 60% de las exportaciones son minerales y se están generando programas para aumentar la producción, la industrialización y la exportación de productos agrícolas y pesqueros.

Otro punto a considerar es la crisis de productos alimenticios y LATAM es mayormente exportadora de esta necesidad y puede convertirse en el gran proveedor del mundo.

Hay que seguir trabajando en conjunto, creo que los bloques como Mercosur, la Alianza del Pacífico, la Comunidad Andina y el Acuerdo Transpacífico son buenos espacios de trabajo sobre estos desafíos. Por ejemplo, en comercio digital, con políticas y programas que establezcan y desarrollen plataformas en las que las pequeñas y medianas empresas puedan prestar sus productos.

¿Cómo fue tu experiencia promoviendo el comercio con Asia, Oceanía y África?

En el Ministerio trabajé en la dirección de Asia, Oceanía y África, donde analizábamos las negociaciones de acuerdos comerciales con países de estos continentes, así como la implementación y administración de estos acuerdos.

Tuve la oportunidad de ser coordinadora del proceso para la optimización del TLC Perú-China y Perú-India, pero también participé en el proceso de ratificación del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TTP), uno de los acuerdos más ambiciosos del mundo, que involucra a 11 países de LATAM y el Asia Pacífico. Por esta experiencia, puedo decir que China es actualmente el principal socio comercial para gran parte de los países de Latinoamérica. En Perú, representa el destino del 45% de las exportaciones totales y creo que hay zonas de complementación donde podemos trabajar, no solo ofreciendo minerales, sino productos pesqueros y agrícolas que son demandados por el mercado asiático.

Hay una tendencia al acercamiento de los países de Asia y Oceanía hacia LATAM. La primera adhesión a la Alianza del Pacífico, conformada por Chile, Colombia, Perú y México fue Singapur y están en espera Nueva Zelanda, Australia y Canadá. Hay mucho interés de estos países en trabajar con América Latina, para la producción e inversión.

En cuanto a África, es un continente al que no nos hemos acercado mucho. Una novedad importante en este continente que nos puede acercar más, es que hace dos años lanzó un tratado continental, el Área Continental Africana de Libre Comercio – AfCFTA que involucra a gran parte de los países, solo con excepción de cuatro. Esto busca fomentar el comercio intraregional y avanzar juntos a una mayor apertura económica. Están negociando el comercio de bienes, servicios, propiedad intelectual, facilidades de inversión. Si bien ya había tratados comerciales en África, eran muy diversos y no tan ambiciosos. Este nuevo acuerdo permite que el continente se posicione mejor en la plataforma de comercio internacional y se espera que haya una oportunidad importante de trabajar con este bloque.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *