Asociación Peruana de Profesionales en Logística – APPROLOG

En este informe para Movant Connection, Mauricio Franco, Presidente de la Asociación Peruana de Profesionales en Logística (APPROLOG), nos detalla la situación del sector logístico mexicano en el 2022 y sus expectativas para 2023.

“El 2022 fue un año de recuperación económica y reactivación operativa, que además tuvo variables externas que complicaron la gestión logística”.

En 2021 las actividades logísticas tenían dos escenarios: las que siguieron operando por el tipo de actividad con pocas restricciones sanitarias, y las que tenían restricciones parciales o totales lo que implicó que los equipos logísticos se redujeran o hasta se eliminaran. El Perú fue uno de los países con mayores restricciones en muchos sectores económicos.

El 2022 fue un año de recuperación económica y reactivación operativa, que además tuvo variables externas que complicaron la gestión logística, como el incremento de fletes marítimos, la falta de contenedores, el incremento de los combustibles, etc. Todas estas variables afectaban directamente los costos logísticos.

Bajo este escenario, los principales desafíos en 2022 estuvieron enfocados principalmente en estabilizar las operaciones bajo un escenario de mucha incertidumbre y mucho foco en la optimización de procesos dado el incremento de costos. Este balance fue muy demandante de recursos no solo logísticos y operativos, sino con perfiles de análisis de datos, innovación y búsqueda de eficiencias.

En los logros, muchas empresas han podido superar satisfactoriamente este escenario, lo que ha generado que tengamos, de cara al futuro, equipos logísticos muy fortalecidos.

“Este escenario requiere que los equipos de trabajo y los profesionales se enfoquen mucho en armar estructuras muy flexibles”.

Definitivamente el principal aprendizaje del año está relacionado al nuevo mundo al que nos enfrentamos. Hace unos años hablábamos del mundo VUCA (Volátil, Incierto, Complejo y Ambiguo) y ahora hasta eso quedó atrás para referirnos al mundo como BANI (Frágil, Ansioso, No Lineal e Incomprensible).

Este escenario aplicado a la logística, requiere que los equipos de trabajo y los profesionales se enfoquen mucho en armar estructuras muy flexibles, sin dejar de lado los costos y el enfoque en eficiencias que van a ser siempre indicadores relevantes en las cadenas de suministro.

Para poder tener estructuras flexibles es imprescindible el factor humano, así como los sistemas para poder virar a la dirección correcta de manera rápida.

“Para 2023 seguiremos con la recuperación económica y consolidando la nueva realidad”.

Después de un 2021 con mucha restricción, puertos bloqueados, poco movimiento de mercadería y un repunte de la actividad online y por consecuencia el delivery a domicilio. El 2022 se fueron estabilizando algunos crecimientos y recuperando las actividades con baja carga.

El foco para las operaciones va a estar en el control de stocks, búsqueda de eficiencias operativas, consolidar operaciones flexibles, negociaciones de fletes con navieras y sobre todo planes de retención de personal clave.

Todos los logísticos hemos tenido una maestría intensiva en resiliencia, los últimos 3 años nos han enseñado mucho y tenemos que capitalizarlo.

Mi recomendación para los profesionales del sector es que potencien tres puntos: capacitación, red de contactos y trabajo colaborativo. Esto les dará una ventaja competitiva, las habilidades duras son un “must” en todos los que estamos en el medio, por lo que las habilidades blandas son las que les darán una diferenciación especial.

Etiquetas: APPROLOG, Comercio Exterior, Logcomex, Logística, Logística Internacional, Logística Perú, Mauricio Franco, Movant Connection, Perú

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